Receta de mascarilla facial DIY

Receta de mascarilla facial DIY

Hacer tu cosmética en casa

La verdad es que yo he ido haciendo alguna vez cosmética casera con buenos ingredientes aunque en mi día a día prefiero usar los productos que Ringana nos ofrece. Primero porque su alta eficacia (jamás, repito, jamás he usado productos que transformaran mi piel del modo como lo ha hecho Ringana).

Segundo, porque son veganos, sostenibles y frescos, y del mismo modo como escojo alimentos sin pesticidas y frescos para comer, para el resto de compras (higiene, cosmética…) sigo siendo fiel a mis principios.

Y tercero porque Ringana como marca me flipa y sé que con mi compra estoy participando en potenciar marcas que se lo curran para mejorar este mundo.

Dicho esto… de vez en cuando me gusta hacer mis propios potingues cosméticos, para jugar, porque son un chute de nutrientes para mi piel, y porque quiero y puedo ;).

Así que aquí va una receta que aprendí de Rocío Rivera, maestra de cosmética casera, y que he customizado con mis aceites esenciales.

Ingredientes para tu mascarilla facial:

Necesitas:

– 1/2 zanahoria hervida

– 1/2 aguacate

– 1 c.s. de miel pura

– 2 gotas de aceite esencial a tu elección

La receta es tan sencilla como chafar y mezclar en un bol el aguacate y la zanahoria. Añadimos la cucharada de miel y mezclamos bien. Cuando ya la tenemos bien emulsionada añadimos 2 gotas (sí, sólo 2) de aceite esencial. Te recomiendo especialmente y según tus necesidades:

– A.e. pachulí: antiarrugas

– A.e. ylang ylang: aporta luz a tu piel y controla el exceso de grasa.

– A.e. sándalo: antiarrugas y adecuado en pieles con acné

– A.e. geranio: nutre la piel seca, suaviza las líneas de expresión.

El ritual:

Convierte tu baño en un spa. Te sugiero que conviertas ese momento, esa rutina facial, en un ritual. Tener un ritual diario te empodera y cuida tu autoestima.

Puedes encender alguna vela, poner tu difusor con tus aceites esenciales favoritos, un poco de música agradable… Aplícate la mascarilla a consciencia y sin prisas. Túmbate y relájate acompañada de la música y el aroma del ambiente.

¿Te das cuenta de qué diferente es una rutina facial con prisas y por obligación, que un ritual como este? Como en todo, la diferencia está en tu actitud, y en la intención de reservarte unos minutos al día (de los 1.440 que tiene un día) para ti.

Si pruebas esta receta cuéntame cómo ha dejado tu piel 😉

Tu plan B de menú saludable

Lo ideal, ideal, ideal, ya sabemos lo que es. O por lo menos, lo que queremos que sea. Pero la vida a veces tiene otros planes y, antes de que la improvisación te lleve a tomar decisiones poco sanas, te invito, en este vídeo, a que tengas tu plan B.

Desayuno. Café a prueba de balas.

Quizá te suena de haberlo visto por redes sociales. O te lo ha contado tu compi de gimnasio. O lo has probado ya. O te da la sensación que te estoy hablando en chino. Café bulletproof, conocido también como «a prueba de balas».

Desayuno. Yogur con granola

En este blog ya tienes varias entradas sobre los mitos que rodean el concepto del desayuno (aquí), y algunas ideas para que rompas el ayuno nocturno (aquí). Pero hoy se me ha ocurrido abrir dentro de la categoría de «Recetas», una exclusiva para los desayunos. Así que hoy te presento mi desayuno más habitual este verano: Yogur con granola.

Paquetitos de calabacín

Podría haber titulado esta receta «raviolis de calabacín» o incluso «canelones de calabacín». Así seguro que Google me hubiese posicionado mejor porque, bien pensado, nadie va a buscar una receta que se llame «paquetitos». Pero mira, me ha salido así. Y es que parecen paquetitos.
Bueno al lío. Esta receta es buenísima. La hacía ya hace años cuando impartía un extraescolar para niños de Primaria que se llamaba MiniXef. Y siempre que la hacía, flipaban.
Flipar todo lo que un niño puede flipar cuando una receta «demasiado sana» está rica y deliciosa. Y además, es que te la voy a presentar de dos maneras. La ligera y veraniega, y la más plato contundente.
Mira qué bien, dos recetas en una.

Mis 5 usos preferidos del incienso

Mis 5 usos preferidos del incienso

Ya lo sabían los Reyes Magos…

…y por ello le trajeron al Niño Jesús oro, mirra e incienso. Porque esta maravilla de la naturaleza vale oro, por todas sus propiedades y aplicaciones, tanto físicas como emocionales.

Tradicionalmente el incienso aparece en innumerables pasajes bíblico y en otros tantos textos históricos. Los usos del aceite esencial de incienso se han aprovechado desde la antigüedad como parte de la medicina alternativa y la cosmética natural.

Y este artículo voy a contarte por qué es uno de mis aceites esenciales preferidos y los 5 usos básicos que le doy.

¿De dónde sale?

Ya sabemos que los aceites esenciales los obtenemos destilando diferentes partes de las plantas, como sus pétalos, hojas, raíces… En este caso el maravilloso incienso proviene de la resina del árbol Boswellia Carterii o Boswellia Sacara, que se cultiva en gran medida en las regiones árabes.

Young Living sabe de la importancia de respetar el hábitat natural de sus plantas, y es por ello que la plantación de Boswellia de la que Young Living obtiene su aceite esencial se encuentra en los acantilados de caliza de las montañas Dhofar de Omán, que parece ser el entorno perfecto para el crecimiento de dicho árbol. En esta región los árboles de Boswellia llevan cultivándose durante más de 5.000 años.

Y aprovecho para quitarme de nuevo el sombrero ante Young Living porque son la la primera y única empresa en el mundo en obtener el permiso para destilar y exportar el aceite Sacred Frankincense omaní y llevarlo al mundo occidental. Su resina se recoge de la misma forma y siguiendo el mismo calendario que se ha usado siempre para así continuar esta tradición centenaria.

Dicho esto, te propongo lo 5 usos que le doy yo al aceite esencial de incienso:

1. Baño antiestrés

Uno de los principales usos del aceite esencial de incienso es el tratamiento de la ansiedad y el estrés. Desde hace muchos siglos se ha empleado para relajar el sistema nervioso, pues parece ser que su aroma particular tiene un efecto positivo en la transmisión de mensajes al sistema límbico del cerebro.

Cuando me siento estresada y quiero regalarme un rato para mí, lo añado en la bañera con agua caliente y sales de Epson.  Y me proporciona una agradable sensación de tranquilidad que frena estas emociones que deseo apartar.

2. Limpieza sin tóxicos

En mi cruzada de evitar limpiadores tóxicos e introducir soluciones naturales para desinfectar mi hogar, con el aceite esencial de incienso me encuentro un excelente aliado aunque no es de los más conocidos para estas labores.

Sus propiedades antimicrobianas remueven los microorganismos de cualquier superficie, muchísimo mejor que otros productos convencionales. En sinergia con otros aceites esenciales, vinagre, bicarbonato y poco más, es suficiente para desodorizar y limpiar profundamente los espacios interiores de la casa.

3. Antiséptico natural

No te imaginas lo eficiente que es el aceite esencial de incienso para la desinfección de pequeñas heridas. Ya sé que en Young Living tenemos otros aceites y sinergias perfectos para este fin, pero si tienes aceite esencial de incienso en casa, que sepas que sus propiedades eliminan la presencia de microorganismos infecciosos y aceleran el proceso de recuperación de la piel. Espectacular.

En estos casos como siempre que apliquemos aceites esenciales de forma tópica, es necesario su mezcla con un aceite portador, como de oliva o jojoba, ya que su uso directo puede ser un poco agresivo para la dermis.

4. Dormir sin ronquidos

En este caso el aceite esencial de incienso antes de dormir beneficia no sólo al señor roncador de casa sino también a mí, que por fin puedo dormir sin tales aspavientos a mi vera…

El aceite esencial de incienso relaja el sistema nervioso y ayuda a disminuir esas emociones que afectan, de una u otra forma, la calidad de sueño. Sus activos naturales abren los conductos respiratorios y evitan molestias como la congestión y los ronquidos. Y es perfecto para ayudar al cuerpo a alcanzar una temperatura apropiada para dormir.

5. Cosmética natural

Cuando empecé a elaborar mi propia cosmética natural casera (todavía me falta mucho camino por recorrer, pero estamos en ello…), el aceite esencial de incienso fue uno de los aceites que rápidamente adopté en mi baño.

Añadido a un aceite vegetal portador hidratante, este aceite esencial mejora la calidad de la piel, disminuye la presencia de acné, manchas e imperfecciones. Sus compuestos tonifican los tejidos y previenen la aparición de arrugas prematuras. Una maravilla, vamos…

Y en realidad lo uso mucho más, desde que me llegó con mi kit de inicio de aceites esenciales, como por ejemplo en mis meditaciones matutinas o en mi sérum capilar para la psoriasis.

¿Qué te parecen todas estas aplicaciones? ¿Conoces alguna más?

¿Por qué cocinar con aceites esenciales?

¿Por qué cocinar con aceites esenciales?

Plantas aromáticas en tu cocina

En la buena tradición culinaria nunca falta el uso de las hierbas y plantas aromáticas. Recuerdo la cocina de mi abuela, con tarros de cristal de plantas varias. Tomillo, manzanilla, romero, laurel… Un buen puchero o sopa siempre lleva esas hojas de tomillo. O ese guiso con una brizna de romero. Ambos terapéuticos, delicisos y reconfortantes…

Los aceites esenciales de una planta, se obtienen destilando la misma, y concentran las moléculas aromáticas de ésta.

Es decir, una gota de aceite esencial de tomillo contiene todas las moléculas aromáticas del tomillo. Una gota, por lo tanto, es muchísimo más potente que el puñado de hojas que puedas usar de la planta.

La Naturaleza nos ofrece maravillosas plantas que podemos usar en nuestras cocinas. Y sus aceites esenciales son la parte más poderosa de éstas.

¿Qué beneficios me aporta cocinar con aceites esenciales?

Pues tal como acabas de leer, el principio activo de la planta aromática se concentra en su aceite esencial. Es fácil, pues, deducir qué beneficios tiene cocinar con los aceites esenciales.

A nivel terapéutico, una sopa de tomillo que podríamos tomar para recuperarnos de una gripe o malestar, es mucho más curativa si la cocinamos con a.e. de tomillo. Cocinar con aceites esenciales, pues, tiene un objetivo terapéutico, de cuidar tu salud y la de los tuyos.

En el caso de seguir una alimentación antiinflamatoria el uso de aceites esenciales nos facilita muchísimo el trabajo enriqueciendo tu menú con sustancias inmunomoduladoras y antioxidantes altamente antiinflamatorias. Puedes aprender más sobre este tema aquí.

A nivel organoléptico, esto es, su sabor, ganamos en intensidad. Vamos a usar tansólo un par de gotas para un guiso de cuatro comensales, y ganaremos en un sabor algo distinto al que estamos acostumbrados en la planta seca; un sabor más profundo.

Añadiría además que cocinar con aceites esenciales te invita a hacerlo con consciencia plena. A reservar ese rato para pensar, enriquecer, cocinar y elaborar con cariño y cuidado esos manjares que vais a disfrutar en casa. Cocinar es un arte y un acto de amor hacia los tuyos. ¡Ojalá tuviéramos más tiempo para hacerlo de forma consciente y tranquila! ¿verdad?

En fin, que si no tenemos tiempo, cocinar con aceites esenciales tendrá el mismo efecto terapéutico y quedarán igual de delciosos. Pero el cariño y el tiempo que le dedicamos, yo creo que se nota en el resultado final 😉

¿Todos los aceites esenciales se pueden ingerir?

No. Hay algunos aceites esenciales, algunas plantas, que no son comestibles. Sin embargo, de entre los que sí son comestibles también deberíamos puntualizar. Pues que sean comestibles o no depende de su grado de pureza y de la calidad del proceso de elaboración. Imagínate, si el aceite esencial concentra tantos componentes de la planta, cuán importante es garantizar su pureza para que puede asegurarse su ingesta.

El sello Seed to Seal de los aceites esenciales de Young Living nos garantiza que están libres de pesticidas y de cualquier producto y proceso químico desde la tierra  donde se cultivan, el agua de sus riegos, la semilla que usan y los cuidados de la planta hasta que se destila para elaborar el aceite esencial.

Esto nos garantiza un aceite esencial de una pureza inigualable y apto para el consumo humano.

Cómo usarlos

Hay dos principios que debes recordar cuando vayas a usar los aceites esenciales en tu cocina:

1- Las moléculas aromáticas de los aceites esenciales son muy volátiles y por encima de 65º C se desnaturalizan.

2- Los aceites esenciales no son hidrosolubles, por lo tanto si los echas directamente en el cazo quedarán flotando en el agua sin ninguna gracia.

Teniendo estos dos principios claros, puedes cocinar tranquilamente con tus aceites esenciales. Si quieres añadirlos a tu guiso, apaga el fuego, espera a que se temple un poco y añade los aceites esenciales.

La forma como los añadimos es con la técnica del palillo: introduce un palillo en la botellita de aceite esencial, vuelca para que se impregne de aceite, y mete el palillo en el guiso dándole unas vueltas.

Otra forma, quizá la más fácil de introducir los aceites esenciales en la cocina es en las preparaciones frías: en ensaladas, helados, batidos y bebidas. Es muy fácil hacer una vinagreta o salsa con aceite esencial de albahaca o limón, por ejemplo, en una proporción de 1 gota de aceite esencial por cada 100 ml de aceite vegetal (de oliva).

Mi primera vinagreta

Si nunca has cocinado con aceites esenciales te recomiendo que empieces por aquí. Recuerda la proporción de 1 gota de a.e. por cada 100 ml de aceite vegetal:

– 1 g a.e. tomillo

– 1 g a.e. romero

– 1 g a.e. mandarina

– 100 ml aceite de oliva virgen extra

– pizca de sal

Mezcla bien en un tarro con tapa, para poder agitar. Sirve con una ensalada o verduras a la parrilla u horno. La mezcla de plantas con cítricos es deliciosa.

¿Te atreves y me cuentas? ¿Has empezado ya a usar los aceites esenciales en tu cocina? Puedes compartir en comentarios tus dudas o logros, y si lo prefieres, agendamos una reunión para aprender más (aquí).

Tratamiento holístico en psoriasis capilar

Tratamiento holístico en psoriasis capilar

Psoriasis capilar

La psoriasis es una enfermedad autoinmune que se manifiesta con heridas de diversa tipología en la piel y en la que la inflamción supone un fuerte detonante. Esta inflamación puede deberse por una alimentación pro-inflamatoria, agentes externos que tus genes no reconoce (pesticidas, tóxicos) o bien por un estrés crónico y sostenido, gran causante de la inflamación crónica de bajo grado y de muchas patologías actuales.

En este vídeo te cuento cuál puede ser un muy buen enfoque para tratar una psoriasis, y en concreto, una psoriasis capilar, con un tratamiento holístico que comprenda:

  • Tratamiento nutricional
  • Gestión del estrés
  • Aplicación tópica de aceites esenciales.

¿Sabías de todos los beneficios que nos ofrece la Naturaleza con sus aceites vegetales y aceites esenciales para tratar de forma holística esta patología?

Tóxicos en tu piel

Tóxicos en tu piel

Tóxicos en tu día a día

Estoy segura que si aterrizas en este blog tomas o quieres tomar consciencia de tu salud y de cómo cuidarte. Escribo a menudo para animarte a que comas saludable y motivarte para que hagas ejercicio en tu día a día.

Hoy, escribo algo diferente. Porque si bien es importante la calidad de lo que está en tu plato, también lo es, y muchísimo, la de tus productos cosméticos. Muchas veces he percibido que no sois conscientes que la crema que nos extendemos en la piel, realmente penetra en ella y llega a nuestro torrente sanguíneo. De esta misma forma funcionan los medicamentos en formato pomada (como el Voltarén, por ejemplo).

Y, para más inri, también lo que respiramos en nuestro hogar, día a día, minuto a minuto. Ahí está el problema de todos los tóxicos que nos untamos y que respiramos: el día a día. Como pasan por unas normativas de seguridad, las cantidades que se usan en cada uno de tus productos de cuidado y de limpieza son «seguros para el consumo/uso humano», pero ahí jugamos con nuestro propio nivel de tolerancia y el factor acumulativo.

Todos estos ingredientes que se supone «seguros», van acumulándose en tu cuerpo, en algunos casos, y en otros, simplemente vas respirándolos día a día, hasta que tu cuerpo grita.

Ya sabes, cuando tu cuerpo grita lo hace en forma de síntoma, síndrome o enfermedad.

Productos cosméticos:

Como productos cosméticos entendemos champús, gel de ducha, jabón, labial, pasta de dientes, desodorante, cremas… Se estima que una mujer puede consumir una media diaria de 12 productos cosméticos con 160 ingredientes distintos. 

A través de la piel entran en nuestro torrente sanguíneo sustancias nocivas acumulándose en nuestro organismo. Muchas de esas sustancias son disruptoras hormonales y están vinculadas a alergias, trastornos hormonales o síndrome de hipersensibilidad química.

Y en otros casos, podemos encontrar fácilmente derivados del petróleo en labiales (petrolatum, parafina líquida…) que ahogan, literalmente, la piel.

Algunos de estos ingredientes indeseados son:

  • Aluminium. En desodorantes
  • Parafinas (parafinum liquidum), Petrolatum. En labiales
  • Triclosán. En jabones, dentífricos
  • “ –paraben”. Parabenes. En cremas
  • Phthalates. Ftalatos. En la laca de uñas y pintalabios
  • Sodium Laureth SulfateSodium Lauryl Sulfate. En champús
  • Nanopartículas (nano). En protectores solares
  • Parfum. Tras este ingrediente “Parfum (Fragance)” se incluyen más de 3.000 compuestos distintos, que suelen ser muy alergénicos.

Hay muchísimos más, incapaces de aprendérnoslos de memoria, pero en este buscador puedes encontrar los ingredientes de tus productos (aquí).

Limpieza del hogar:

Otro factor muy importante, puesto que las sustancias aromáticas de los productos de limpieza que usamos las respiramos y algunos también entran en contacto con la piel, como en el caso de los suavizantes para la ropa.

Algunos de estos ingredientes en tus productos de limpieza no sólo son tóxicos sino que son carcinógenos.

Ftalatos

Se encuentran principalmente en los ambientadores, en detergentes e incluso en el papel higiénico. Estos son disruptores endocrinos capaces de disminuir la cantidad de espermatozoides en hombres y diferentes trastornos en las mujeres.

El percloroetileno o «PERC»

Principalmente en quitamanchas y limpiadores en seco (como para alfombras y tapicería). Se trata de una neurotoxina clasificada como posible carcinógeno.

El triclosán

Usado también en productos cosméticos, en productos de limpieza se encuentra en jabones y detergentes vendidos como «antibacterianos». Es un agente antibacteriano agresivo que promueve el crecimiento de bacterias resistentes a los fármacos y además se concentra en ríos y arroyos por lo que resulta un gran contaminante para el medio ambiente acuático.

Amonios cuaternarios

Lo encontramos en los suavizantes para ropa. Tienen el mismo problema que el triclosán, haciéndonos resistentes a los antibióticos, pueden producir dermatitis y se sospecha que también están relacionados con problemas respiratorios.

El 2-butoxietanol

Común en todos los limpiadores universales y multiusos, y en limpiacristales (es el ingrediente que le otorga ese típico olor). Es un eficaz disolvente que legalmente puede no aparecer  en la etiqueta, pero según la EPA y especialmente si se usa en espacios cerrados puede causar dolor de garganta por inhalación, narcosis, edema pulmonar y hepático severo y daño renal.

El amoníaco

Presente en limpiacristales y muchos detergentes afecta principalmente a las personas asmáticas o personas con problemas pulmonares y respiratorios y pude ayudar a que se desarrolle bronquitis crónica.

Hidróxido de Sodio

En desatascadores y limpiadores de horno, es extremadamente corrosivo y puede causar quemaduras graves. Si lo inhalamos sufriremos un fuerte dolor de garganta.

Solución

Al igual que el que te muevas, comas sano, en fin, que te cuides, está en tus manos (mi primer mantra fue «Yo soy la única responsable de mi vida»), los productos cosméticos que utilizas y cómo limpias tu hogar también es una elección tuya.

Apuesta por productos naturales, aunque sin duda lo ideal es aprender a leer las etiquetas, ya que a veces el nombre de «natura, eco, bio, etc.» se usa tansólo como reclamo de márqueting.

Aquí puedes leer una de mis marcas cosméticas preferidas y sin duda para la limpieza del hogar, mi recomendación es que hagas tus propios productos con apenas un concentrado con garantía como el Household Cleaner de Young Living, vinagre blanco, bicarbonato de sodio, y poco más.

Si quieres mejorar en estos aspectos y dar el paso hacia un cuidado personal más respetuoso contigo y con el medio ambiente, no dudes en pedírmelo porque estaré encantada de guiarte. Escríbeme a contact@martamatocoach.com y vemos cuáles son tus necesidades inmediatas.

Cuéntame, ¿eras consciente de todos estos tóxicos en tu día a día? ¿Compartirías con nosotros tus fórmulas caseras de cuidado y limpieza del hogar?

El ABC de la aromaterapia con aceites esenciales

El ABC de la aromaterapia con aceites esenciales

El poder de los aceites esenciales.

Cuidar de tu salud y de la de los tuyos es hoy más importante que nunca. Hemos aprendido que nutrir nuestro cuerpo con alimentos ricos y sin procesar, huyendo de azúcares y de procesados nos protege contra los virus. También que tanto el tiempo de descanso como el que dedicamos a actividades físicas son importantes para mantenernos saludables. Pero hoy, además, vengo a hablarte de una ciencia que forma parte de nuestros cuidados diarios y pocas veces te he hablado de ella: la aromaterapia.

¿Qué tienen de ciencia los aceites esenciales?

La aromaterapia es la ciencia que usa los aceites esenciales quimiotipados (eso es, de composición bioquímica conocida) con el fin de restablecer la salud y el equlibrio en nuestro cuerpo. La podemos usar, pues, tanto a modo preventivo como terapéutico ante una infección aguda o cualquier otra enfermedad.

Un aceite esencial es un extracto líquido, concentrado y complejo, obtenido por destilación, por arrastre de vapor de agua de los órganos de ciertas plantas. 

Un aceite esencial es, pues, la esencia destilada de la planta aromática. Y está compuesto por un centenar de moléculas terpénicas y aromáticas particularmente activas.

¿Cómo llegaron los aceites esenciales a mi vida?

Pues como muchos otros buenos hábitos: cuando fui madre. De eso ya hace más de 15 años… Con el primero me puse las pilas con los cimientos: alimentación y deporte diario. Y con la segunda me especialicé en aquellos detalles que eran importantes: estudié Aromaterapia y también Oligoterapia (aunque de esta última te hablaré otro día, si acaso…).

Como nos pasa a muchas cuando tenemos hijos, quise evitar medicarlos en exceso y potenciar su salud con remedios naturales. 

Desde luego que los aceites esenciales fueron todo un descubrimiento. ¿Sabes esa época, cuando van al Parvulario, que media clase tiene bronquitis? Y la otra mitad, mocos todo el día… Bueno, pues puedo asegurar que mis hijos ni una cosa ni otra. Obviamente que se resfriaban, pero les trataba con aceites esenciales y los virus no pasaban de ahí.

Como anécdota, te cuento que el boca-oreja en la puerta del cole fue un no parar y muchas mamis me encargaban mis sinergias de aceites esenciales para sus peques.

En este otro artículo compartí algunas de las sinergias que hacíamos por aquél entonces.

 

Aplicaciones de un aceite esencial

Si te haces con un botiquín inteligente de aceites esenciales, en realidad descubrirás un montón de aplicaciones. Y de paso, te ahorrarás comprar otros productos más caros, más contaminantes y menos efectivos ;).

Salud:

Desde infecciones respiratorias, migrañas, hemorroides, indigestiones, otitis, sinusitis, asma, alergias, depresión… No sé cuántos ejemplos poner porque en realidad en casa lo tratamos todo con aceites esenciales. Los aceites esenciales tienen una efectividad terapéutica muy potente y un amplio espectro de soluciones.

Belleza:

Desde sérums, contorno de ojos, antiarrugas, mascarilla capilar… Si tienes dos o tres aceites esenciales y un buen aceite vegetal como el de caléndula o de almendras dulces, puedes hacer tu propia cosmética DIY. ¡Qué gratificante es hacerte tus propias fórmulas! ¿Qué consigues haciendo tu cosmética con aceites esenciales? Primero, evitar ingredientes horrorosos como los disruptores endocrinos que lleva la cosmética convencional. Segundo, disponer de cosmética realmente efectiva.

Higiene:

Con los productos de higiene del hogar sí que me alarmo mucho más, porque no nos imaginamos la cantidad de componentes no ya contaminantes, sino realmente tóxicos y peligrosos que tenemos en la alacena. Y al final, ¿el mejor suavizante?, el vinagre. ¿Un quitamanchas? Percarbonato. Con aceites esenciales es muy fácil hacer limpiadores multiusos, limpiacristales, fregasuelos, etc.  Y la casa huele tremenda…

 

¿Cómo usar los aceites esenciales?

 La forma más fácil de usar los aceites esenciales, y por la que la mayoría de personas empiezan, es por inhalación. Un difusor es una herramienta muy útil para difundir la esencia terapéutica de los aceites.

Otro uso más directo, y el que solemos usar en casa, es vía tópica. Según qué aceite esencial usamos necesitamos diluirlo con un aceite vegetal como base. Así tratamos resfriados, migrañas y la mayoría de trastornos cotidianos.

Y por último, el más potente y el último al que deberías recurrir si no estás iniciada en los aceites esenciales, ingiriéndolo. Puedes comprar cápsulas vegetales vacías, a las que añadirás 2-3 gotas de aceite esencial y un poco de aceite de oliva. Así es como se suele tomar por ejemplo el aceite esencial de orégano, uno de los mejores y más potentes antibióticos conocidos.

En casa los aceites esenciales forman parte de nuestro día a día. Si tú también quieres aprender, o quieres que te asesore sobre qué aceites esenciales son más idóneos para tus necesidades, cuéntame. Te ofrezco una sesión gratuita para presentarte el poder terapéutico de la aromaterapia.

¿Sabías de la potente efectividad de los aceites esenciales como tratamiento a tantas síntomas? ¿Se te ha ocurrido alguna vez hacer tu propia cosmética con aceites? Cuéntame, te leo en comentarios 😉