El poder de los aceites esenciales.
Cuidar de tu salud y de la de los tuyos es hoy más importante que nunca. Hemos aprendido que nutrir nuestro cuerpo con alimentos ricos y sin procesar, huyendo de azúcares y de procesados nos protege contra los virus. También que tanto el tiempo de descanso como el que dedicamos a actividades físicas son importantes para mantenernos saludables. Pero hoy, además, vengo a hablarte de una ciencia que forma parte de nuestros cuidados diarios y pocas veces te he hablado de ella: la aromaterapia.
¿Qué tienen de ciencia los aceites esenciales?
La aromaterapia es la ciencia que usa los aceites esenciales quimiotipados (eso es, de composición bioquímica conocida) con el fin de restablecer la salud y el equlibrio en nuestro cuerpo. La podemos usar, pues, tanto a modo preventivo como terapéutico ante una infección aguda o cualquier otra enfermedad.
Un aceite esencial es un extracto líquido, concentrado y complejo, obtenido por destilación, por arrastre de vapor de agua de los órganos de ciertas plantas.
Un aceite esencial es, pues, la esencia destilada de la planta aromática. Y está compuesto por un centenar de moléculas terpénicas y aromáticas particularmente activas.
¿Cómo llegaron los aceites esenciales a mi vida?
Pues como muchos otros buenos hábitos: cuando fui madre. De eso ya hace más de 15 años… Con el primero me puse las pilas con los cimientos: alimentación y deporte diario. Y con la segunda me especialicé en aquellos detalles que eran importantes: estudié Aromaterapia y también Oligoterapia (aunque de esta última te hablaré otro día, si acaso…).
Como nos pasa a muchas cuando tenemos hijos, quise evitar medicarlos en exceso y potenciar su salud con remedios naturales.
Desde luego que los aceites esenciales fueron todo un descubrimiento. ¿Sabes esa época, cuando van al Parvulario, que media clase tiene bronquitis? Y la otra mitad, mocos todo el día… Bueno, pues puedo asegurar que mis hijos ni una cosa ni otra. Obviamente que se resfriaban, pero les trataba con aceites esenciales y los virus no pasaban de ahí.
Como anécdota, te cuento que el boca-oreja en la puerta del cole fue un no parar y muchas mamis me encargaban mis sinergias de aceites esenciales para sus peques.
En este otro artículo compartí algunas de las sinergias que hacíamos por aquél entonces.
Aplicaciones de un aceite esencial
Si te haces con un botiquín inteligente de aceites esenciales, en realidad descubrirás un montón de aplicaciones. Y de paso, te ahorrarás comprar otros productos más caros, más contaminantes y menos efectivos ;).
Salud:
Desde infecciones respiratorias, migrañas, hemorroides, indigestiones, otitis, sinusitis, asma, alergias, depresión… No sé cuántos ejemplos poner porque en realidad en casa lo tratamos todo con aceites esenciales. Los aceites esenciales tienen una efectividad terapéutica muy potente y un amplio espectro de soluciones.
Belleza:
Desde sérums, contorno de ojos, antiarrugas, mascarilla capilar… Si tienes dos o tres aceites esenciales y un buen aceite vegetal como el de caléndula o de almendras dulces, puedes hacer tu propia cosmética DIY. ¡Qué gratificante es hacerte tus propias fórmulas! ¿Qué consigues haciendo tu cosmética con aceites esenciales? Primero, evitar ingredientes horrorosos como los disruptores endocrinos que lleva la cosmética convencional. Segundo, disponer de cosmética realmente efectiva.
Higiene:
Con los productos de higiene del hogar sí que me alarmo mucho más, porque no nos imaginamos la cantidad de componentes no ya contaminantes, sino realmente tóxicos y peligrosos que tenemos en la alacena. Y al final, ¿el mejor suavizante?, el vinagre. ¿Un quitamanchas? Percarbonato. Con aceites esenciales es muy fácil hacer limpiadores multiusos, limpiacristales, fregasuelos, etc. Y la casa huele tremenda…
¿Cómo usar los aceites esenciales?
La forma más fácil de usar los aceites esenciales, y por la que la mayoría de personas empiezan, es por inhalación. Un difusor es una herramienta muy útil para difundir la esencia terapéutica de los aceites.
Otro uso más directo, y el que solemos usar en casa, es vía tópica. Según qué aceite esencial usamos necesitamos diluirlo con un aceite vegetal como base. Así tratamos resfriados, migrañas y la mayoría de trastornos cotidianos.
Y por último, el más potente y el último al que deberías recurrir si no estás iniciada en los aceites esenciales, ingiriéndolo. Puedes comprar cápsulas vegetales vacías, a las que añadirás 2-3 gotas de aceite esencial y un poco de aceite de oliva. Así es como se suele tomar por ejemplo el aceite esencial de orégano, uno de los mejores y más potentes antibióticos conocidos.
En casa los aceites esenciales forman parte de nuestro día a día. Si tú también quieres aprender, o quieres que te asesore sobre qué aceites esenciales son más idóneos para tus necesidades, cuéntame. Te ofrezco una sesión gratuita para presentarte el poder terapéutico de la aromaterapia.
¿Sabías de la potente efectividad de los aceites esenciales como tratamiento a tantas síntomas? ¿Se te ha ocurrido alguna vez hacer tu propia cosmética con aceites? Cuéntame, te leo en comentarios 😉