Dieta anti-estreñimiento

Dieta anti-estreñimiento

En un artículo anterior te expliqué cómo detectar a través de tus heces cuán de sana está tu microbiota.

En este artículo voy a profundizar en la alimentación anti-estreñimiento, poniendo énfasis en aquellos alimentos que te ayudarán más a cuidar tu intestino.

Y es que es muy habitual en consulta encontrarnos personas que, sufriendo estreñimiento, optan por intentar solucionarlo añadiendo más fibra a su dieta. Grosso error. Cierto es que por allá por los años 80, cuando uno sufría estreñimiento e iba a la farmacia o a la herboristería de barrio a buscar un alivio, le vendían salvado de trigo u otros cereales. Creyendo que aumentando la fibra (los salvados son pura fibra) evacuarían más fácilmente. Ese salvado venía con instruciones: debía tomarse con mucha agua.

¿Cuál es el problema?

Imagina que estás en mitad de un atasco de tráfico, en una avenida principal de tu ciudad, no hay salida que valga…en plena hora punta. ¿Se te ocurriría llamar a una grúa para que te quitara de ahí? No, ¿verdad? Pues los coches en ese atasco reflejan las heces; y la grúa, el salvado.

Con este ejemplo tan gráfico puedes entender que en muchos casos, tomar salvado incluso puede empeorar más las cosas… ¡Menudo tapón se va a generar en la Gran Vía si al atasco vemos llegar una grua!

Alimentos amigos de tu intestino

Si bien es cierto que la ingesta de fibra no debe nunca ser inferior a unos 30 gr diarios, estos se consiguen muy fácilmente añadiendo fruta y verdura en nuestros platos. Repito: fruta y verdura.

Pero una advertencia: suponiendo que tu ingesta de fibra se sitúa alrededor de unos 10 gr en lo que sería la típica “dieta de cafetería” (pasta, carne, dulces y poco más), debes subir la cantidad de tu ingesta paulativamente.

Si tu dieta es rica en alimenos M.A.C. (carbohidratos accesibles para la microbiota), probióticos, prebióticos, fructosolisacáridos… no debes preocuparte porque seguro que no sufres estreñimiento. Estos carbohidratos son aquellos que son fermentados: pectina, almidón resistente, fructano, GOS, hemicelulosa.

Entre los alimentos que alimentan tu microbiota encontramos: espárragos, brócoli, setas y champiñones, patatas, boniatos, manzana, ajo, cebolla, chicoria, legumbres…

Además de los M.A.C. todo alimento fermentado va a suponer un gran alimento para tu intestino y para evitar así el estreñimiento. Entre la alimentación habitual el alimento fermentado más consumido es el yogur, en todas sus variantes. También el kéfir, el kéfir de agua, la kombucha, el chucrut o col fermentada, el kimchi (verduras fermentadas).

Detalles con importancia

Dicho esto, hay otros detalles dentro del menú que puedes tener en cuenta. No son la panacea, no busques soluciones rápidas… 

Normalmente esas soluciones rápidas es lo que más se busca y ¡crean dependencia! ¿Cuántas personas conoces que desayunan un kiwi porque si no, no van de vientre? ¿O que necesitan su café con leche para vaciarse por las mañanas? Y ya no hablemos de “soluciones” como tomar agua con lino reposado cada mañana, o una cucharada de aceite en ayunas… Eso, además de ser incómodo y crearte ataduras, no son soluciones, son parches.

Pero algunos detalles que sí puedes hacer además de seguir una alimentación como la que te he detallado son:

 

  • Tomar un caldo de huesos (como este), rico en colágeno y minerales y un gran aliado para tu intestino. Tómate un par de vasos al día con un poco de pimienta cayena, que ayudará a estimular el peristaltismo intestinal (que tu intestino se mueva).
  • Además del caldo, bebe agua. O infusiones. Es muy propio de las personas que sufren estreñimiento que además sean poco bebedoras.
  • Anímate a hacer chucrut*. Es fácil y muy gratificante hacer tus propios fermentados en casa. Te recomendamos este libro para iniciarte: Pura fermentación, de Sandor Ellix
  • Acostúmbrate a tener patatas cocidas en la nevera. (Aquí también te lo explicaba). Es lo que se llama la patata prebiótica o patata del día después. Cuando cocinamos un tubérculo y lo enfriamos, se crea almidón resistente que llega a tu microbiota y la alimenta. Cuando necesites unas patatas de guarnición, o para hacer una tortilla, etc., tómalas de la nevera y caliéntalas a la plancha o añadiéndolas a la receta. Están ricas y cuidas tu intestino.

¿Cómo hacer chucrut en casa?

El chucrut es col fermentada. Dicha fermentación es obra de muchos microorganismos: una bacteria llamada coliforme inicia la fermentación, y mientras se encarga de producir ácido, el entorno se vuelve más favorable para las bacterias leuconostoc.

A medida que el ácido continua aumentado y el pH disminuye, al leuconostoc le siguen los lactobacilos. Y aunque todo esto te suene como si te estuviéramos hablando en swahili, hacer chucrut en casa es mucho más fácil que entenderlo.

  • Necesitas:

Un tarro fermentador. O bien: un tarro de cerámica o cristal de 4 L; un plato de un diámetro más pequeño que el tarro; un peso (puede ser una garrafa de agua).

  • Ingredientes:

Una col de 1 quilo aproximadamente. Dos cucharadas de sal marina sin refinar.

  • Procedimiento:

Corta muy fina la col o repollo y ponla en un cuenco ancho. Ahí la masajeas un rato con una pizca de sal. No te cortes, “amásala” con las manos para romper sus fibras y eliminar su agua. Ve cortando, salando y masajeando. Puedes añadir otras verduras o zanahoria rallada, por ejemplo. Pero si es tu primera vez, te aconsejamos que pruebes sólo con col.

Vierte la col masajeada y salada en la vasija, poco a poco y por capas, para poder chafar cada capa y evitar que quede aire estancado. El chucrut debe quedar bien comprimido.

Cubre con un plato y colócale encima el peso. Tapa con un paño limpio para evitar que caiga polvo ¡o bichos!

Déjalo fermentar tranquilamente en un rincón de tu cocina, y cada día más o menos ejerce presión sobre el chucrut para que se mantenga en salmuera. El tiempo de preparación puede oscilar entre 1 a 4 semanas, dependiendo de la temperatura de la habitación.

Para finalizar…

Cuando todo esta base alimentaria está bien construída, nos movemos habitualmente para activar el peristaltismo intestinal (movimientos intestinales), y aún así no acabamos de conseguir mejorar este estreñimiento, entonces sí podemos echar mano de complementos nutricionales no como parches sino para que nos ayuden a arreglar el orígen del problema.

Te hablo básicamente de probióticos vivos y con cepas concretas y de fibras prebióticas que los nutran. Y el tándem que mejores resultados me ha dado en mis casi 17 años de profesión, es el Cleansing (fibra prebiótica) junto con los probióticos Biotic. El primero todamos más o menos de forma regular y con pequeños descansos, y el segundo cada 4 meses.

En mi comunidad de WhatsApp presentaré un video explicando mejor sus beneficios y cómo y cuándo tomarlos. 

¿Estreñimiento? Tu microbiota tiene la solución

¿Estreñimiento? Tu microbiota tiene la solución

¿Sabes que los primeros estreñimientos datan de por lo menos el s. XVIII? Algo tan sencillo como comer – digerir – evacuar… parece que a menudo no es tan simple.

Se considera estreñimiento a la dificultad de ir de vientre entre 2-3 veces a la semana y por lo general, con heces duras y secas.

Cuando eso ocurre, ni los supositorios ni los laxantes son la solución porque éstos últimos además acaban empeorando el problema.

¿Por qué vas estreñida?

Lo primero que deberíamos hacer es averiguar la causa de tu estreñimiento:

¿Será por una dieta demasiado seca, rica en harinas y pobre en frutas o vegetales?

¿Debido a los efectos secundarios de algún medicamento?

¿Quizá sufres estreñimiento sólo cuando viajas (una de cada dos personas lo sufren cuando están fuera de casa)?

¿Podríamos estar ante una Diabetes Mellitus no diagnosticada?

¿O a un problema de tiroides?

Obviamente esto no es tan sencillo pero con la ayuda de tu nutricionista y de tu médico seguro que averiguamos la causa.

Una vez descartadas posibles intolerancias, alergias y las causas que acabamos de mencionar, toca actuar.

La primera norma: mira tus heces.

Te lo digo en serio, la costumbre de mirar cómo son nuestras heces te puede ayudar a averiguar muchísimas cosas.

En la tabla de aquí al lado tenemos la “Escala de Bristol”, una herramienta para describir los distintos tipos de heces que hay.

Lo ideal sería que tus heces se parecieran al tipo 4. Si es así, no modifiques nada de lo que estés haciendo porque seguro que disfrutas de una microbiota intestinal sana y eficiente.

ir de vientre

Hay vida dentro de ti: la microbiota

La microbiota es el conjunto de los microorganismos (todas las bacterias, arqueas, eucariotas y virus) presentes en un entorno definido. La microbiota que se situa en el tracto intestinal se la denomina, pues microbiota intestinal.

La microbiota intestinal de un individuo medio se compone de más de 100 billones de microorganismos y pesa alrededor de 200 gramos. Tienes de 150 a 200 veces más genes en tu microbiota intestinal que en el conjunto de tus células.

Toda esta gran (enorme) población en tu interior tiene 4 funciones principales:

1- Función metabólica. Es decir, se dedica a fermentar los alimentos no digeribles, a absorver los nutrientes (vitaminas, aminoácidos, etc.) mediante las células del intestino para favorecer la digestión.

2- Función de barrera. Tu microbiota te defiende contra los microbios y toxinas. Y además son las responsables de formar la película mucosa que protege tu pared intestinal.

3- Función de defensa. Y es que tu microbiota intestinal es el campamento base de tu sistema inmunológico.

4- Función de mantenimiento. Mantiene la mucosa intestinal, el buen funcionamiento del tubo digestivo y la actividad enzimática de la mucosa.

Como ves, te interesa cuidar tu microbiota no sólo si sufres estreñimiento, sino por el cuidado de tu salud en general.

Para ello debes distinguir entre probióticos y prebióticos. Los primeros son microorganismos vivos que en las cantidades adecuadas otorgan un beneficio en la salud del huésped…que eres tú. Y los segundos son fibras no digeribles que sin embargo nutren a los primeros. Entre los prebióticos encontramos fructooligosacáridos, galactooligosacáridos, oligofructosa e inulina.

Te dejo el enlace aquí de una interesantísima entrevista de Gut Microbiota News Watch: entrevista.

Dicho esto, tu alimentación dedicada a cuidar tu microbiota debería centrarse en la pareja que te acabode presentar. Sin embargo, para remediar el estreñimiento hasta no hace muchos años se ponía énfasis en tomar fibra. Y actualmente se ha comprobado que eliminarla puede ser incluso mejor solución. ¿Por qué? Porque si sufres estreñimiento es que tus heces están alojadas en el último tracto del recto y no pueden salir. Si comes más fibra, lo que sucederá es que tus heces todavía se compactarán más.

La ingesta de fibra en estreñimiento crónico produce gases, flatulencias y distensión abdominal, causando malestar y dolor.

Conclusión

Si sufres estreñimiento la clave está en el cuidado de tu microbiota intestinal. Y para ello deberías asegurarte que en tu mesa haya especias, MAC (carbohidrato accesible para la microbiota), alimentos fermentados como el chucrut, yogur y kéfir, cebolla, ajo, plátano…

¿Te das cuenta de la importancia de cuidar tu microbiota? ¿Crees que tienes una buena salud intestinal?

¿Por qué cocinar con aceites esenciales?

¿Por qué cocinar con aceites esenciales?

Plantas aromáticas en tu cocina

En la buena tradición culinaria nunca falta el uso de las hierbas y plantas aromáticas. Recuerdo la cocina de mi abuela, con tarros de cristal de plantas varias. Tomillo, manzanilla, romero, laurel… Un buen puchero o sopa siempre lleva esas hojas de tomillo. O ese guiso con una brizna de romero. Ambos terapéuticos, delicisos y reconfortantes…

Los aceites esenciales de una planta, se obtienen destilando la misma, y concentran las moléculas aromáticas de ésta.

Es decir, una gota de aceite esencial de tomillo contiene todas las moléculas aromáticas del tomillo. Una gota, por lo tanto, es muchísimo más potente que el puñado de hojas que puedas usar de la planta.

La Naturaleza nos ofrece maravillosas plantas que podemos usar en nuestras cocinas. Y sus aceites esenciales son la parte más poderosa de éstas.

¿Qué beneficios me aporta cocinar con aceites esenciales?

Pues tal como acabas de leer, el principio activo de la planta aromática se concentra en su aceite esencial. Es fácil, pues, deducir qué beneficios tiene cocinar con los aceites esenciales.

A nivel terapéutico, una sopa de tomillo que podríamos tomar para recuperarnos de una gripe o malestar, es mucho más curativa si la cocinamos con a.e. de tomillo. Cocinar con aceites esenciales, pues, tiene un objetivo terapéutico, de cuidar tu salud y la de los tuyos.

En el caso de seguir una alimentación antiinflamatoria el uso de aceites esenciales nos facilita muchísimo el trabajo enriqueciendo tu menú con sustancias inmunomoduladoras y antioxidantes altamente antiinflamatorias. Puedes aprender más sobre este tema aquí.

A nivel organoléptico, esto es, su sabor, ganamos en intensidad. Vamos a usar tansólo un par de gotas para un guiso de cuatro comensales, y ganaremos en un sabor algo distinto al que estamos acostumbrados en la planta seca; un sabor más profundo.

Añadiría además que cocinar con aceites esenciales te invita a hacerlo con consciencia plena. A reservar ese rato para pensar, enriquecer, cocinar y elaborar con cariño y cuidado esos manjares que vais a disfrutar en casa. Cocinar es un arte y un acto de amor hacia los tuyos. ¡Ojalá tuviéramos más tiempo para hacerlo de forma consciente y tranquila! ¿verdad?

En fin, que si no tenemos tiempo, cocinar con aceites esenciales tendrá el mismo efecto terapéutico y quedarán igual de delciosos. Pero el cariño y el tiempo que le dedicamos, yo creo que se nota en el resultado final 😉

¿Todos los aceites esenciales se pueden ingerir?

No. Hay algunos aceites esenciales, algunas plantas, que no son comestibles. Sin embargo, de entre los que sí son comestibles también deberíamos puntualizar. Pues que sean comestibles o no depende de su grado de pureza y de la calidad del proceso de elaboración. Imagínate, si el aceite esencial concentra tantos componentes de la planta, cuán importante es garantizar su pureza para que puede asegurarse su ingesta.

El sello Seed to Seal de los aceites esenciales de Young Living nos garantiza que están libres de pesticidas y de cualquier producto y proceso químico desde la tierra  donde se cultivan, el agua de sus riegos, la semilla que usan y los cuidados de la planta hasta que se destila para elaborar el aceite esencial.

Esto nos garantiza un aceite esencial de una pureza inigualable y apto para el consumo humano.

Cómo usarlos

Hay dos principios que debes recordar cuando vayas a usar los aceites esenciales en tu cocina:

1- Las moléculas aromáticas de los aceites esenciales son muy volátiles y por encima de 65º C se desnaturalizan.

2- Los aceites esenciales no son hidrosolubles, por lo tanto si los echas directamente en el cazo quedarán flotando en el agua sin ninguna gracia.

Teniendo estos dos principios claros, puedes cocinar tranquilamente con tus aceites esenciales. Si quieres añadirlos a tu guiso, apaga el fuego, espera a que se temple un poco y añade los aceites esenciales.

La forma como los añadimos es con la técnica del palillo: introduce un palillo en la botellita de aceite esencial, vuelca para que se impregne de aceite, y mete el palillo en el guiso dándole unas vueltas.

Otra forma, quizá la más fácil de introducir los aceites esenciales en la cocina es en las preparaciones frías: en ensaladas, helados, batidos y bebidas. Es muy fácil hacer una vinagreta o salsa con aceite esencial de albahaca o limón, por ejemplo, en una proporción de 1 gota de aceite esencial por cada 100 ml de aceite vegetal (de oliva).

Mi primera vinagreta

Si nunca has cocinado con aceites esenciales te recomiendo que empieces por aquí. Recuerda la proporción de 1 gota de a.e. por cada 100 ml de aceite vegetal:

– 1 g a.e. tomillo

– 1 g a.e. romero

– 1 g a.e. mandarina

– 100 ml aceite de oliva virgen extra

– pizca de sal

Mezcla bien en un tarro con tapa, para poder agitar. Sirve con una ensalada o verduras a la parrilla u horno. La mezcla de plantas con cítricos es deliciosa.

¿Te atreves y me cuentas? ¿Has empezado ya a usar los aceites esenciales en tu cocina? Puedes compartir en comentarios tus dudas o logros, y si lo prefieres, agendamos una reunión para aprender más (aquí).

¿Por qué Beyond Omega es tu mejor elección?

¿Por qué Beyond Omega es tu mejor elección?

Uno tiene que ser consciente de qué coche conduce. Eso es la genética. Y luego, por qué caminos va a llevarlo. Eso es la epigenética.

Cuando sabes cómo eres, qué predisposición genética tienes, cuál es tu talón de Aquiles, ser inteligente significa actuar en consecuencia, cuidarte y prevenir esos «males». No resignarse a ellos. Prevenirlos.

Eso es lo que me pasa a mí con los Omega 3. Hace años que los consumo porque por mi predisposición genética, y como dicen en la tele, «en el marco de una dieta equilibrada», me ayudan mucho. Sé que estaría peor sin ellos.

Beyond Omega es otro nivel. Y te lo digo yo, que he probado decenas de omegas.

Te presento a Beyond Omega

Esta maravilla de suplemento viene presentado en una cajita metálica redonda, con 60 perlas.

Cada perla contiene ácidos grasos de omega 3, vitaminas liposolubles y metabolitos secundarios en máxima calidad. E insisto en lo de «máxima calidad» porque Ringana trabaja con alta tecnología y produce todos sus productos con unas formulaciones a base de principios activos espectaculares.

Y como todas sus creaciones, estas perlas de Omega 3 son también veganas y por lo tanto, aptas también para las personas alérgicas al pescado o que siguen una alimentación vegetariana.

beyond omega

Beneficios de tomar Beyond Omega

Los beneficios de suplementarte con ácidos grasos omega 3 son muchos. Y si tu elección es Beyond Omega todavía son más. Básicamente, la relación de ácidos grasos omega 3 y omega 6, idealmente sería 1:1 o 1:2. Para que te hagas una idea, en una dieta occidental convencional puede llegar a ser 1:20 (eso significa una dieta absolutamente inflamatoria).

Ringana nos dice:

«El omega 3 (EPA y DHA) de microalgas ayudan a mantener la función cardíaca normal, contribuye a mantener la función cerebral y la vista.

Además la vitamina D3 liposoluble de extracto de liquen desempeña un papel primordial en numerosos procesos del cuerpo humano, sistema inmune, y propicia un aporte de vitamina solar durante todo el año. 

El extracto de arándano contiene antocianinas, apoya la vista desde dentro y permite una mejor visión nocturna y crepuscular. 

Los metabolitos secundarios del licopeno, la astaxantina, la luteína y la zeaxantina, así como la vitamina E son antioxidantes y protegen de radicales libres

Indicaciones de Beyond Omega

Como ves, yo personalmente lo recomendaría a todo el mundo, pero en especial a personas que ya sufren o tienen predisposición a sufrir las siguientes patologías:

– Síndrome Metabólico

– Hipercolesterolemia

– Estrés y ansiedad

– Apatía

– Hiperactividad

– Parquinson

– Enfermedades degenerativas

– Ojos secos y patologías oculares

– Eczemas

– Psoriasis

También lo recomiendo, como potente anti-inflamatorio que es, para deportistas. Y, como puede ayudarnos a concentrarnos más y mejor, y nuestras neuronas están formadas principalmente de ácidos grasos, ¿se diría que Beyond Omega puede hacernos más inteligentes? Yo creo que sí, que potencia nuestras virtudes 😉

Mi experiencia con Beyond Omega

Personalmente me preocupa mi salud cerebral (quiero envejecer con todas mis facultades), mis ojos secos y mi psoriasis.

La psoriasis me acompaña desde mis 18 años, y la llevo bien, la verdad, pero me la trabajo mucho: alimentación con muchos vegetales, grasas saludables (ahí entran los omega 3) y gestión del estrés con la práctica de la meditación y los aceites esenciales (aquí puedes saber un poco más del tema).

Los ojos secos me sorprendieron en diciembre de 2017 más o menos, cuando decidí operarme mi miopía. La operación bien, gracias… pero las secuelas… ojos secos (más información aquí). Si no los sufres o no conoces a alguien que los sufra quizá te parezcan una tontería pero son un horror. ¿Te imaginas qué podría ser despertarte por la mañana e intentar abrir los ojos y que estos no se te abrieran? Sí, de angustia máxima… Sobretodo la primera vez que me ocurrió.

Llevo tomando omega 3, como he dicho, casi toda mi vida para trabajar estas condiciones.

Y un mes y medio, sólo un mes y medio, con Beyond Omega.

No sé si mi función cerebral habrá mejorado, obviamente esto lo sabremos cuando vaya envejeciendo.

No tengo actualmente ningún brote de psoriasis. Sí te puedo decir que cada año por Navidades mi cuero cabelludo me empezaba a picar. Este año no.

Y lo que sí puedo asegurarte con la mano en el corazón es que mi sequedad ocular ha mejorado en un porcentaje brutal. Lo sé porque mis ojos siempre suelen tener «sed», y llevo unas semanas que no me piden gotas oculares.

Y lo sé también porque este año la enfermedad de ojos secos empeoró y he tenido los párpados bastante enfermos. Desde que empecé a tomar las Beyond Omega están más frescos, más deshinchados y menos propensos a inflamarse.

Así que he decidido escribir este post y dedicarlo a las Beyond Omega porque realmente con ellas Ringana se ha ganado mi fidelidad.

Sin duda te las recomiendo si sufres cualquiera de las patologías que menciono, o simplemente para tomar, a modo preventivo, un par o tres de veces al año. Estoy segura que tu piel, tu energía y tu estado de ánimo lo notarán.

Este botón de aquí abajo te lleva directa a la página de las Beyond Omega de Ringana, por si quieres más información o si quieres regalártelas. Y ante cualquier duda, posología, necesidades… cuéntame en comentarios 😉

El ABC de la aromaterapia con aceites esenciales

El ABC de la aromaterapia con aceites esenciales

El poder de los aceites esenciales.

Cuidar de tu salud y de la de los tuyos es hoy más importante que nunca. Hemos aprendido que nutrir nuestro cuerpo con alimentos ricos y sin procesar, huyendo de azúcares y de procesados nos protege contra los virus. También que tanto el tiempo de descanso como el que dedicamos a actividades físicas son importantes para mantenernos saludables. Pero hoy, además, vengo a hablarte de una ciencia que forma parte de nuestros cuidados diarios y pocas veces te he hablado de ella: la aromaterapia.

¿Qué tienen de ciencia los aceites esenciales?

La aromaterapia es la ciencia que usa los aceites esenciales quimiotipados (eso es, de composición bioquímica conocida) con el fin de restablecer la salud y el equlibrio en nuestro cuerpo. La podemos usar, pues, tanto a modo preventivo como terapéutico ante una infección aguda o cualquier otra enfermedad.

Un aceite esencial es un extracto líquido, concentrado y complejo, obtenido por destilación, por arrastre de vapor de agua de los órganos de ciertas plantas. 

Un aceite esencial es, pues, la esencia destilada de la planta aromática. Y está compuesto por un centenar de moléculas terpénicas y aromáticas particularmente activas.

¿Cómo llegaron los aceites esenciales a mi vida?

Pues como muchos otros buenos hábitos: cuando fui madre. De eso ya hace más de 15 años… Con el primero me puse las pilas con los cimientos: alimentación y deporte diario. Y con la segunda me especialicé en aquellos detalles que eran importantes: estudié Aromaterapia y también Oligoterapia (aunque de esta última te hablaré otro día, si acaso…).

Como nos pasa a muchas cuando tenemos hijos, quise evitar medicarlos en exceso y potenciar su salud con remedios naturales. 

Desde luego que los aceites esenciales fueron todo un descubrimiento. ¿Sabes esa época, cuando van al Parvulario, que media clase tiene bronquitis? Y la otra mitad, mocos todo el día… Bueno, pues puedo asegurar que mis hijos ni una cosa ni otra. Obviamente que se resfriaban, pero les trataba con aceites esenciales y los virus no pasaban de ahí.

Como anécdota, te cuento que el boca-oreja en la puerta del cole fue un no parar y muchas mamis me encargaban mis sinergias de aceites esenciales para sus peques.

En este otro artículo compartí algunas de las sinergias que hacíamos por aquél entonces.

 

Aplicaciones de un aceite esencial

Si te haces con un botiquín inteligente de aceites esenciales, en realidad descubrirás un montón de aplicaciones. Y de paso, te ahorrarás comprar otros productos más caros, más contaminantes y menos efectivos ;).

Salud:

Desde infecciones respiratorias, migrañas, hemorroides, indigestiones, otitis, sinusitis, asma, alergias, depresión… No sé cuántos ejemplos poner porque en realidad en casa lo tratamos todo con aceites esenciales. Los aceites esenciales tienen una efectividad terapéutica muy potente y un amplio espectro de soluciones.

Belleza:

Desde sérums, contorno de ojos, antiarrugas, mascarilla capilar… Si tienes dos o tres aceites esenciales y un buen aceite vegetal como el de caléndula o de almendras dulces, puedes hacer tu propia cosmética DIY. ¡Qué gratificante es hacerte tus propias fórmulas! ¿Qué consigues haciendo tu cosmética con aceites esenciales? Primero, evitar ingredientes horrorosos como los disruptores endocrinos que lleva la cosmética convencional. Segundo, disponer de cosmética realmente efectiva.

Higiene:

Con los productos de higiene del hogar sí que me alarmo mucho más, porque no nos imaginamos la cantidad de componentes no ya contaminantes, sino realmente tóxicos y peligrosos que tenemos en la alacena. Y al final, ¿el mejor suavizante?, el vinagre. ¿Un quitamanchas? Percarbonato. Con aceites esenciales es muy fácil hacer limpiadores multiusos, limpiacristales, fregasuelos, etc.  Y la casa huele tremenda…

 

¿Cómo usar los aceites esenciales?

 La forma más fácil de usar los aceites esenciales, y por la que la mayoría de personas empiezan, es por inhalación. Un difusor es una herramienta muy útil para difundir la esencia terapéutica de los aceites.

Otro uso más directo, y el que solemos usar en casa, es vía tópica. Según qué aceite esencial usamos necesitamos diluirlo con un aceite vegetal como base. Así tratamos resfriados, migrañas y la mayoría de trastornos cotidianos.

Y por último, el más potente y el último al que deberías recurrir si no estás iniciada en los aceites esenciales, ingiriéndolo. Puedes comprar cápsulas vegetales vacías, a las que añadirás 2-3 gotas de aceite esencial y un poco de aceite de oliva. Así es como se suele tomar por ejemplo el aceite esencial de orégano, uno de los mejores y más potentes antibióticos conocidos.

En casa los aceites esenciales forman parte de nuestro día a día. Si tú también quieres aprender, o quieres que te asesore sobre qué aceites esenciales son más idóneos para tus necesidades, cuéntame. Te ofrezco una sesión gratuita para presentarte el poder terapéutico de la aromaterapia.

¿Sabías de la potente efectividad de los aceites esenciales como tratamiento a tantas síntomas? ¿Se te ha ocurrido alguna vez hacer tu propia cosmética con aceites? Cuéntame, te leo en comentarios 😉

5 pensamientos que debes evitar cuando «te pones a dieta»

5 pensamientos que debes evitar cuando «te pones a dieta»

Post editado el 17 de agosto de 2022.

Esto ya suena mal…

Ponerse a dieta no mola. Conozco personas que siempre que las veo «están a dieta». Algunas, te lo prometo, incluso parecen adictas a ellas. Es como si les gustara estar al día con las modas dietéticas de las famosas. Otras, por el contrario (las más) son esclavas de la cultura dieta. Personas, la mayoría mujeres, que siempre se ponen a dieta y tarde o temprano fracasan. Porque claro, estar siempre «a dieta», ya sea hipocalórica, low carb, cetogénica… esa locura no es sostenible. Eso no lo aguanta nadie cuerdo.

Otra cosa es ponerte en manos de un profesional que te ayude a un cambio de hábitos definitivo. Y que encima, lo disfrutes.

Lo llames pues, como lo llames, si tu objetivo es perder grasa (peso), sigue leyendo:

5 pensamientos que debes evitar cuando te pones a dieta.

Pensamiento 1: ¿El aguacate engorda?

Quien dice el aguacate, dice la pera, la manzana, el pollo o las sardinas. El pensamiento en sí de que esto o aquello engorde…¡quítatelo de la cabeza! Siendo puristas te diría que menos el agua, todo engorda, ok? Parece complicado pero en el fondo se trata de reconciliarte con la comida. Ella no te engorda. Tampoco te adelgaza. La comida te nutre. Y a veces esta, te complica la vida, pero ya está, no hay más.

Tienes que acostumbrarte a comer disfrutando de lo bueno de ese alimento, sin tener el radar cuenta-calorías conectado.

Pensamiento 2: Mi amiga pierde más rápido

Lo sabes de sobra: las comparaciones nunca han sido buenas. ¡No te compares! Aunque hagas la misma «dieta» que tu amiga o vecina, el resultado nunca será el mismo. ¿Sabes por qué? Porque el tratamiento en sí no depende sólo de lo que comes (o sea, de la dieta) sino también de si te mueves o no, de si descansas bien, de cómo vas de vientre, de tu momento del ciclo menstrual, y además, de en qué hora del día haces tus ingestas*.

(*Apunte: esto último se llama cronobiología. Y últimamente me está flipando, pero esto ya será materia para otro artículo…¿Sabes que si tu cena te la tomas a las 7 p.m. o a las 10 p.m. no tendrá la misma respuesta metabólica en tu organismo? Una manzana tiene 52 kcal todas las horas del día, pero tus hormonas no están igual por la mañana que por la tarde… Interesante, ¿verdad?).

Pensamiento 3: Obsesionarse por los quilos

Ni te fijes en ellos. Aquí te pido que seas de letras puras. Un sobrepeso u obesidad es más un problema de inflamación corporal que no un problema matemático. Con esto me refiero que el 100% de las veces (ahí estoy radical…) las tallas y el volumen son más exagerados que la cifra que marca la báscula.

A ver, ¿tú qué quieres? ¿Verte bonita, sentirte ágil, estar sana y fuerte, o bien pesar… no sé… 65 kg? Ponle el número que quieras ahí. El número en sí no te dará la felicidad. La felicidad se siente.

Pensamiento 4: Me he saltado la dieta

¡Ni que fueras una rana! ¡Aquí uno no se salta nada! Si te apetece una pizza, pues te la comes. Si quieres tomarte una cervecita en una terracita de verano, pues andando. Pero el concepto no es «saltarse» nada. Uno tiene que responsabilizarse de lo que hace y, en este caso, de lo que toma. ¿Qué te crees, que yo estoy siempre con una manzana en la mano o qué? Jeje…no, que a mí también me apetece de vez en cuando tomar algo no-sano.

Pero el detalle es que un 80% de mi dieta es sana, y me reservo un 20% por si me apetece algo no-sano. Sin remordimientos. Sin saltos. El pensamiento «me he saltado la dieta» es absolutamente negativo. Te has comido una pizza, vale…, espero que la hayas disfrutado y ahora sigue con lo tuyo, y ya.

Pensamiento 5: «ponerse a dieta»

No veas el daño que me hace el propio título de este artículo. Si te pones a dieta estás ya condenada al fracaso. Ponerse a dieta implica que no es para siempre, que hay una fecha de caducidad. Y, ¿qué te crees que va a pasar cuando ya no estés a dieta? Aix…, preciosa mía, ¡que te olvides ya de las dietas!

No te pongas a nada. Mira tú que a mí, la propia palabra «dieta» ya me chirría. Incluso a mis clientes les suelo decir «te paso una propuesta de menú semanal» que no «te hago una dieta». «Dieta» me suena a restricción, a pasar hambre, a contar calorías, a comida insípida… Aunque ya te te lo he contado alguna vez, la palabra dieta no significa eso, pero tiene una serie de connotaciones que no me gustan nada.

Conclusión:

Si crees que debes perder peso, no te sientes a gusto con tu cuerpo, no estás ágil o no gozas de buena salud, asesórate con un nutricionista actualizado (esto es súper importante, por favor, que tenemos un panorama en este país…que no veas). Este nutri puede ser alguien como yo, que estaré encantada de ayudarte, alguien que:

 

  • no te ponga tostadas y pavo para desayunar (si recurre a procesados con pocas calorías y cero nutrientes en la primera ingesta, malo…)
  • no te haga estar pendiente de la comida todo el día: que si un desayuno a las 9h, un media mañana, bla, bla, bla… Todo el día comiendo a menudo y poco va a dejar tus hormonas medio taradas.
  • no te haga pasar hambre. Comer es un placer. Un enorme placer. Un nutri actualizado te enseñará a disfrutar de la comida de verdad. Te saciarás, disfrutarás, y encima, adelgazarás.
  • te enseñe a disfrutar del proceso. No vivas la dieta como el típico chiste de la mujer que está de mal humor, con hambre y pasándolo mal. Dis-fru-ta. No sólo de los menús (alias, dieta) sino también del placer de cuidarte, de mover tu cuerpo, de quererte y de responsabilizarte de tu salud física y mental.
No te pongas a dieta. Mejora tus hábitos.
Come grasa y sé feliz

Come grasa y sé feliz

Miedo a la grasa. Había una vez, en un lugar no muy lejano, un pueblo que creía que su planeta, la Tierra, era plano. Alguien dijo que en realidad el planeta era redondo... y casi lo queman en la hoguera. En realidad no sé quién fue el genio, porque Galileo Galilei,...

leer más