Video-receta: Ensalada kale love

Video-receta: Ensalada kale love

 

Ella es la más alocada y caprichosa de todas sus hermanas. Con sus rizos verdes y su contundente calcio (el suyo se fija mejor que el de la leche de vaca), se convertirá en tu amiga íntima para ayudarte a prevenir la osteoporosis y la retención de líquido. Seguro que la conoces ya: es la col kale.

En inflamaciones intestinales es una experta, por su acción antiácida y antiinflamatoria. Así que suelo tenerla cerca, como relleno de tortillas, parte de mis guisos o como en la ensalada amorosa que te presento hoy.

Como todas las coles, tiene, además, un gran efecto anti cáncer. ¿Qué más?… ¡Ah sí! Rica en antioxidantes como la vitamina C y la vitamina A, minerales como el potasio, hierro y el comentado calcio.

¿Va a convertirse ya en tu loca y caprichosa amiga?

Ensalada Kale Love:

Ingredientes:
  • 2 hojas de col kale
  • 1 pepino
  • 1 aguacate
  • zumo de 1/2 limón
  • 1 c.s. semillas de chía
  • 1 c.s. alga wakame
  • AOVE
  • Sal marina sin refinar
 
kale

Preparación:

Pon el alga en remojo como mínimo 30 minutos. Mientras, limpia y corta la col con las manos, y amásala amorosamente con AOVE y sal marina sin refinar. Añade el pepino pelado y cortado a rodajas; el aguacate cortado a cubitos. Aliña con aceite, zumo de limón y semillas de chía. Trabaja bien con las manos (el truco está en «amasar» con paciencia y mucho amor), y una vez añadida el alga remojada, deja macerar como mínimo 30 minutos más.

Y como una imagen vale más que mil palabras, ahí va la video-receta de esta amorosa ensalada:

La amiga perfecta para casi todo el año… Te ayudará a limpiarte, a eliminar líquidos y a restablecer tu equilibrio interior. ¡Es mi kale love!

 

¿Cómo sueles comer tú la col kale? ¿La conocías? ¡Comparte tus ideas!

5 tips para sanear tu dieta

5 tips para sanear tu dieta

Me apuesto lo que quieras a que con tanta moda de dietas, tantos expertos rondando por ahí y tantas celebrities confesando sus excentricidades culinarias tú no sabes qué comer ni cómo hacerlo. Tú, que lo único que quieres es estar sano, comer equilibrado y asegurar una buena alimentación a tu familia… ¡no sabes qué corriente o moda seguir! Que si dieta macrobiótica, que si paleo, que si vegana…

Bueno, olvídate de todo eso. Alguna vez te he dado más de una pauta para seguir una alimentción equilibrada (artículo, artículo, artículo). Hoy te voy a explicar 5 sencillos tips para convertir tu dieta, sea cual sea, en una súper dieta:

Estos son algunos de los pilares que trabajamos en consulta y que, a partir de ahí podemos ir construyendo el tratamiento adecuado. Pero esta base, estos 5 tips, son claves. Y tú, ¿sigues alguna dieta de moda? ¿Saneas tus menús? Cuéntame cómo haces para mejorar tu alimentación.

Cocinar recuerdos

Cocinar recuerdos

Cocinar es, indudablemente, una forma de amar.
Si alguna vez me has leído sobre cómo escogemos nuestros alimentos según nuestro estado de ánimo (¡hola, comer emocional!), hoy aquí lo escribo al revés: cómo lo que comemos nos emociona.

¿Fruta antes o después de las comidas?

¿Fruta antes o después de las comidas?

Esta es casi la pregunta del millón. Y no caduca. Quiero decir, que lo mismo la escucho ahora que tenemos tantísima información (buena y mala, que para eso hay tanta) como hace 20 años cuando estaba terminando la carrera..
El otro día me la volvieron a preguntar. Y me dije «oye Marta, grábate, y así difundes tu respuesta por doquier». Y eso hice.

Desayuno. Café a prueba de balas.

Desayuno. Café a prueba de balas.

Quizá te suena de haberlo visto por redes sociales. O te lo ha contado tu compi de gimnasio. O lo has probado ya. O te da la sensación que te estoy hablando en chino. Café bulletproof, conocido también como «a prueba de balas».

14 ideas para comer más vegetales

14 ideas para comer más vegetales

 

Lo puedo decir más alto pero no más claro: Come más vegetales.

Y es que esto es lo más importante que saco de todos los años que llevo en el campo de la nutrición. Fíjate que, entre todas las corrientes dietéticas que hay (las que hay con evidencia científica, digo, no las modas y las locuras de gurús televisivos), hay algo en lo que siempre estamos de acuerdo: come más vegetales. Da igual que te tire una alimentación paleo, o que quieras ser vegetariano, o que te inspires con la macrobiótica… Todas ellas coinciden en cómo se beneficia tu salud cuando aumentas el consumo de vegetales.

Hace unas semanas fui publicando ideas en mi cuenta de Instagram. Y ahora voy a darte un empujón con mis ideas verdes. A ver qué te parece:

Zumos / batidos: aunque la mejor opción es la fruta y verdura entera (masticar es importante), si andas corto de verde, añadir un zumo o un batido a tu día siempre es una ayuda.

Tortillas: me encantan las tortillas entre otras cosas por su versatilidad. ¡Hazlas de lo que se te ocurra! Espárragos, ajetes, kale, escalibada…

Revuelto: lo mismo. Imagina un revuelto esponjoso y jugoso de setas y puerro…mmm…

Ensaladas: inventa ensaladas diferentes cada día. Si te falta práctica, ves anotándolas en una libretita, porque tenemos tendencia a hacer siempre la misma: abrir la nevera, a ver qué le pongo, y acabar haciéndola siempre igual. No, piensa qué ensalada quieres y hazla tal cual. Ensalada de tomate y aguacate, espaguetis de calabacín, kale love salad, gazpachos…

Horno: las verduras al horno son una delicia. Alcachofas al horno, escalibada, calabacín gratinado… Desde que incluyo unos básicos de cocina en mi sesión culinaria dominguera (alias Batch Cooking) enciendo el horno y lo lleno de diferenes verduras que se cocinan solas y las tengo para toda la semana. Por cierto, estas sesiones te vienen incluídas en mi Club VIP.

Pochar: una guarnición muy recurrida en mi casa es la cebolla pochada. Le da ese calor y toque dulce y suave a los platos fuertes que alimenta no solo el cuerpo sino también mi alma. Si tuviera que escoger uno, este sin duda sería mi básico entre los básicos.

Patés: nada es más fácil que hacerte tus propios patés vegetales. ¿Mi preferido? El de alcachofa. Hierve corazones de alcachofa, escurre y tritura con aceite, sal y pimienta. Listo. Pero puedes hacer de pimiento rojo, de calabacín, de berenjena, etc. Es una forma fácil de vegetalizar tus bocadillos o de servirlos en tu aperitivo.

Empanadas y pizzas: ¿quién dice que una pizza no puede ser saludable? Con espinacas, puerro, brócoli, champiñones…

Quiche y otras masas: cualquier masa de hojaldre o quebrada puedes vegetalizarla con tonos verdes, rojos y amarillos.

Woks: una de las formas que más me gusta de comer verdura es cortada a bastoncitos y triángulos y saltearla en aceite de coco en un wok. Queda crujiente, sabrosa y absolutamente apetecible.

Estofados: en meses fríos, nada como un buen estofado. Aprovecha para hacerlo con una buena base de sofrito con mucho vegetal, y trozos de calabaza, calabacín, guisantes….

Cremas: fácil y sin complicaciones. ¿Mis preferidas? De shitake, de cebolla, de champiñones, de calabaza y manzana, y de calabacín. Bueno, ¡y muchas más!

Rebozadas: es el tipo de cocción menos recomendable, pero de vez en cuando, gusta. Puedes rebozarlas con levadura nutricional y semillas de lino molidas, por ejemplo, y en lugar de freírlas hacerlas al horno.

Deshidratadas / chips: ya sea en horno convencional (aquí te mostré cómo hacer chips de kale) como en una deshidratadora, las hortalizas, frutas y verduras deshidratadas suponen no sólo un snack muy saludable sino un toque especial en una ensalada, para coronar un plato de arroz o cereales, o como picatostes originales en una crema.

Ahora ya no tienes excusa porque, como ves, hay muchísimas opciones para incluir vegetales a lo largo del día. Prueba, testea e inventa. En mi consulta a menudo se sorprenden de la versatilidad de las verduras, y es que la mayoría de las veces asociamos comer verdura con plataco de judías hervidas y poco más. ¿Más ideas? Bueno, aquí hay un montón, pero cada mes en mi Club VIP te sorprendo con nuevas aportaciones. 

¿Se te ocurre alguna idea vegetal más? ¡Venga, a ver si llenamos los comentarios de mucho vegepower!