Llevas tiempo con malas digestiones, la barriga hinchada y después de probar mil remedios, infusiones, pastillas, detox… das con alguien (nutricionista o médico) que te pide unas pruebas raras.
Te han hecho tomar un brebaje de lactulosa o glucosa, y soplar en diferentes momentos en lo que se llama el test de aliento. El objetivo del test es determinar la cantidad de hidrógeno y metano del aliento.
Si tienes más de 20 ppm de hidrógeno o un aumento de 10 ppm de metano respecto al valor basal, está diagnosticado: tienes SIBO.
O lo que es lo mismo, Sobrecremiento Bacteriano.
Pues vale, tú, ni idea. Y ahora, ¿qué?
Tu plan B de menú saludable
Lo ideal, ideal, ideal, ya sabemos lo que es. O por lo menos, lo que queremos que sea. Pero la vida a veces tiene otros planes y, antes de que la improvisación te lleve a tomar decisiones poco sanas, te invito, en este vídeo, a que tengas tu plan B.
Dale al play, y cuéntame, ¿tienes ya tus listas hechas para tu plan B?
Recuerda el ejercicio:
1. Haz las listas lo más completas posibles.
2. Asegúrate de tener esos alimentos de la lista en tu nevera o despensa de forma habitual.
3. Escribe 4 ideas de combinaciones para que tengas a mano cuando tengas que recurrir a tu plan B.
¡Qué aproveche!